En el marco del juicio oral y público por el cuádruple crimen de La Loma, declaró hoy por tercera vez el remisero Marcelo Tagliaferro, quien ratificó que en la noche del 26 del noviembre de 2011 llevó a Marisol Pereyra hasta el PH de calle 28, entre 41 y 42, donde ocurrieron los crímenes, y que vio allí -luego de dejar a la pasajera- a Osvaldo "Karateca" Martínez por el espejo retrovisor del auto.
La defensa del Karateca convocó hoy a Tagliaferro para preguntarle por la recompensa que ofreció el ministerio de Justicia bonaerense a quien aporte datos por este caso, de 300.000 pesos.
Tagliaferro dijo que sí se presentó para gestionar el cobro, previo hablar con familiares de las víctimas.
Antes de la declaración del remisero, se realizó un careo entre dos peritos en telecomunicaciones, quienes expusieron opiniones diferentes sobre una llamada que efectuó Martínez cerca de las 22,30 del día del hecho, a su novia Bárbara Santos.
Esa llamada fue captada por tres antenas de telefonía móvil.
Uno sostiene que el celular desde donde se realizó la llamada estaba en movimiento y esta circunstancia fue tomada por la acusación como un indicio contra Martínez, quien aseguró que esa noche estuvo en su vivienda de Melchor Romero.
Sin embargo, el otro experto afirma que esa captación por parte de tres antenas puede ser por saturación de llamadas, que es posible que el aparato se encuentre en un lugar fijo y que por esa saturación se deriva la señal a otra antena.
El Tribunal Oral y en lo Criminal III -integrado por los jueces Ernesto Domenech, Andrés Vitali y Santiago Paolini- reanudará el debate el jueves, a las 9,30, con la declaración del imputado Martínez, quien llegó al juicio con una libertad por falta de mérito dispuesta por la Cámara Penal platense
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